La autora menciona a sus jugos y bebidas vegetales, todos elaborados con elementos crudos como verdaderos "elixires". "Son pociones mágicas", afirma.
Casi doscientas recetas para hacer jugos, licuados y diversos elixires contiene el libro “Paz, amor y jugo verde“, que escribió Marina Borensztein y editó el sello Planeta. La autora estará hoy en Mar del Plata para presentar su última obra. A las 19 charlará con el público en el escenario ubicado en un hotel de Playa Grande.
La autora, que también escribió “Enfermé para sanar” y “Así me cuido yo”, menciona a sus jugos y bebidas vegetales, todos elaborados con elementos crudos como verdaderos “elixires”. “Son pociones mágicas que me dan energía, fuerza y me hacen sentir tan bien que no encontré mejor palabra que elixir”, señaló.
Convencida de las bondades de la nutrición vegetal y natural, sin grasas animales, azúcares ni harinas blancas, Borensztein contó que consume esos jugos “todo el tiempo”, no simplemente como una colación o como una bebida entre las comidas. “Desayuno jugos verdes, no ingiero ningún otro sólido, y con eso salgo a hacer ejercicio físico o a trabajar”, agregó.
Y dijo que su “jugo estrella” es el verde, que elabora siempre con elementos nutricionales diferentes. “Tengo una fórmula estrella, una fórmula base: hojas verdes, que pueden ser rúcula, acelga o espinaca, apio o pepino, frutas como pera o manzana o manzana verde, un limón o una lima o pomelo, un pedacito de jejibre”.
Este nuevo libro, en el que también comunica sobre la necesidad de realizar un cambio de hábito en relación a toda la información que llega por nuestos sentidos, lo escribió durante una estadía en Nueva York, Estados Unidos, ciudad a la que llegó junto a su compañero, el actor Oscar Martínez.
Alejada de la rutina, allí Marina pudo probar alimentos nuevos, inventar recetas, descartar otras y mezclar a gusto. Incluso investigó en libros europeos y estadounidenses, sitios donde los elixires son más comunes en las dietas que en Argentina.
“Mi experiencia me dice que el paladar se adapta, que el cuerpo es inteligente y cuando uno le da algo bondadoso, el cuerpo se hace adicto positivo a este tipo de cosas saludables”, afirmó, siempre convencida de que es primordial cambiar los hábitos con los que nos relacionamos.
“Todo lo que entra por nuestros sentidos se tiene que digerir, eso lo enseña la medicina ayurvédica. Nosotros somos responsables de todas nuestras acciones, ¿cómo te vas a nutrir? ¿qué vas a mirar? ¿qué vas a leer? Todo eso te hace estar sano o enfermo”, consideró.